El área hidráulica de la provincia de Buenos Aires se hace más visible ante las movidas en Trenque Lauquen
Rodrigo Silvosa como se indica en la principal información de nuestro sitio no vino a «poncho», pero tampoco llegó con información precisa y contundente que pudiera generar satisfacción en quienes se habían dado cita. El resarcimiento económico a productores de la zona del complejo El Hinojo-Las Tunas pasó a ocupar un plano insignificante frente a los planteos que trasladaron quienes han visto perder sus campos bajo las aguas que se derivaron al distrito

En términos políticos la visita del subsecretario de Infraestructura Hidráulica a Trenque Lauquen debe rescatarse. No es fácil asistir, sin otra arma que la información técnica que se posee y los magros antecedentes en este problema, a un encuentro donde la mayoría quizá han sido votantes de Cambiemos, pero que a la hora de defender sus intereses privilegian los daños que les ocasionaron los gobiernos provinciales y nacionales, y lógicamente, el deterioro su economía empresarial, personal y familiar.
Rodrigo Silvosa como se indica en la principal información de nuestro sitio no vino a «poncho», pero tampoco llegó con información precisa y contundente que pudiera generar satisfacción en quienes se habían dado cita. El resarcimiento económico a productores de la zona del complejo El Hinojo-Las Tunas pasó a ocupar un plano insignificante frente a los planteos que trasladaron quienes han visto perder sus campos bajo las aguas que se derivaron al distrito, como los que en tiempos de lluvia o ingresos de agua de extraña jurisdicción les provoca que el «corazón se les vaya a la boca».
Se expusieron interesantes posturas, algunas de ellas con tono elevado y hasta se podría concluir con el «dedo acusador». No había espacio en este sentido, pese a las razones que puedan esgrimirse, a cargar sobre las espaldas de gobiernos anteriores el problema presente y futuro. Aunque el encuentro finalizó con la aclaración de los más «belicosos», que el enojo no era contra las autoridades actuales, la tensión – durante todo el desarrollo de la reunión – que se respiraba en el Centro Cívico fue alta.
El funcionario provincial apeló ante los medios antes y después de la reunión, a la figura de María Eugenia Vidal, la gobernadora de Buenos Aires. En todo momento la mencionó y trató de convertirla en una «experta» en la cuestión hídrica. Tampoco había demasiado espacio para «arrimar agua para el molino político de nadie». El interés compartido de los asistentes fue la necesidad de que se trabaje aguas arriba, desde Bragado a Samborombón. Hay un claro desacuerdo con los proyectos transmitidos. Se pretende que lo primero sea terminar con la dervivación de aguas desde Bragado a la Bahía de Samborombón.
No fueron muchos los productores que expusieron su postura. Los que lo hicieron dejaron mensajes. Nos llevaría varios días reflejarlos en este sitio o nuestras radios.
A casi 30 años de aquel desgraciado suceso del desborde de aguas, que parecía interminable flotó la sensación que poco o nada se avanzó. Más aún, algunos apuntaron que «desde que asumió Scioli a los productores agropecuarios de la provincia nos resulta imposible tener respuestas que nos satisfagan. No queremos que esto vuelva a pasar con quién lo reemplazó en el ejecutivo».
Se le preguntó en torno al clima vivido en la reunión y sobre si se iba molesto por este paso en Trenque Lauquen: