El recuerdo masivo a Barracchia deja en claro que «otra Argentina es posible»
Es de esperar que las manifestaciones donde se vuelca el legado, como asi también las decenas de notas publicadas en páginas web sean leídas en donde se «cocina» el poder político en nuestro país
Ha sido un día donde muchas/os transmitieron el reconocimiento a un ciudadano inolvidable de Trenque Lauquen. Ya no hacen falta más comentarios.
«A las pruebas me remito».
La historia no solo está escrita por los que ganan, porque en última instancia «El Gordo» perdió. Y, sin embargo, con hechos concretos, después de 10 años, vaya a saber desde donde, escribe las páginas inolvidables de tanto tiempo conduciendo los destinos de esta ciudad del interior profundo.
Es de esperar que las manifestaciones donde se vuelca el legado, como asi también las decenas de notas publicadas en páginas web sean leídas en donde se «cocina» el poder político en nuestro país. Queda claro que otra Argentina es posible. Solo hay que saberse aferrar, como un abrojo, a los buenos ejemplos. Barracchia, con el férreo acompañamiento de su comunidad, lo evidenció.
Habría que promover quienes hemos palpado las gestiones ejemplares, aunar esfuerzos y hablar en las escuelas sobre su trayectoria. Los niños y muy jóvenes saben de él por comentarios de mayores. En consecuencia, poder divulgar su tarea tendría que ser como una ‘obligación’ curricular. Se debería, además, invitar a exponer en las aulas a quienes lo precedieron, como así también a los que fueron sus compañeros de la niñez, adolescencia y universidad. Lástima que la vida nos arrebató a otro mandatario ejemplar: Juan Carlos Font.
Analicemos si la idea aquí expuesta es posible. Distinguiría, creo, aún más a este Pueblo que es tomado como referencia a nivel nacional e incluso internacional.