Hermetismo en quienes investigan el asesinato de la docente de Trenque Lauquen, Ana Aristimuño

Hay hermetismo en quienes trabajan intensamente en la investigación por el asesinato de Ana María Aristimuño, ocurrido el pasado sábado.

La docente trenquelauquense fue encontrada maniatada, amordazada y muerta por asfixia en su domicilio de la calle Carlos Casares de Trenque Lauquen, un sector muy poblado de la ciudad de Trenque Lauquen. Tenía 54 años, madre de dos hijos, de activa participación gremial en la educación, se desempeñaba como secretaria en un establecimiento denominado EP47. Su muerte, como se ha venido apuntando, generó mucha tristeza en el medio, habida cuenta de su bien ganada consideración social.

Entiende en la causa la Fiscal Karina Talarico, la que asumió esta responsabilidad judicial hace muy poco tiempo atrás, más allá que tiene calificados antecedentes. Fue secretaria de la Fiscalía general y también se desempeñó en una de las fiscalías del Departamento Judicial con asiento en Trenque Lauquen.

Hasta ahora la funcionaria ha formulado muy escuetas declaraciones, donde se expresó amablemente ante los periodistas, sin dar demasiados detalles. El lunes todo pareció indicar que habría un rápido esclarecimiento a partir de las manifestaciones de Talarico de que se volvería a tomar testimonio a un vecino de la víctima porque sus manifestaciones a pocas horas de acontecido el hecho, aparecían como inconsistentes.

El lunes hasta últimas horas fue posible ver en la casa de la víctima a móviles de la Policía de la provincia y autos particulares. En estos últimos, se movilizaba personal de la fiscalía. Durante este martes, Infoecos constató la presencia en el inmueble que ocupaba Aristimuño de un auto y la puerta del frente abierta, lo que evidenciaba que estaban sus familiares. En tanto se vió salir del edificio de la justicia, pasadas las 15 horas a la doctora Talarico, la que a las 17.30, aproximadamente, ingresó a la comisaría de Trenque Lauquen. Fue imposible para esta redacción establecer contacto teléfonico, al menos, con el titular de la Policía distrital, comisario Marco Arregui.

Trascendió de fuentes habitualmente bien informadas que se trabaja sobre tres hipótesis. Es posible que el sigilo con el que viene actuando la Justicia y la Policía, permita tener más esperanzas que el hecho sea esclarecido pronto.