«Era la imagen que solo suele verse en las series americanas», señaló un investigador

Fue asesinada Ana Aristimuño, una vecina, madre y docente de Trenque Lauquen, el día sábado. Conocido el hecho, desató manifestaciones de sorpresa, enorme tristeza e interrogantes en la comunidad en general, pero muy especialmente entre quienes la conocieron. Ello se trasuntó en las redes sociales, al punto – se aseguró a Infoecos – de hasta reducir el movimiento nocturno de los sábados. Hubo una circulación vehícular y de concurrencia a los lugares públicos, mucho menor a lo de días similares de este mes y los anteriores con temperaturas agradables. «Es común cuando se conocen noticias de estas características que se verifique un movimiento mucho menor», señaló a periodistas de nuestro sitio, un serio investigador de la ciudad.

Ana Aristimuño fue hallada por familiares directos, su Madre y Hermana, sentada y atada. Tenía marcas en el cuello que le habrían producido asfixia, y un pañuelo en su boca. Al existir el secreto del sumario, se complica conocer detalles más puntuales y, cien por ciento, fidedignos. Se estima en las fuentes consultadas que el asesinato se produjo el sábado. Vivía sola. Su padre que compartía el lugar tiene 90 años y se encuentra internado, desde hace más de una semana. Madre de dos hijos, no de ellos radicado en la ciudad de Buenos Aires y el otro, que compartía domicilio, no se encontraba en Trenque Lauquen.

En el interior del inmueble que habitaba no se verificaron faltantes de elementos. Tampoco desórden.

El ingreso al lugar de quién o quienes fueron autoras/es del asesinato se produjo por la puerta del patio. Hay algunos inmuebles sin habitar. Los vecinos que han sido consultados por la Policía que se encuentra al frente de tratar de lograr el esclarecimiento, señalaron que no tienen presente se produjeran durante el sábado u horas previas, reacción de los perros que tienen dueño, en el vecindario. No hay ningún vestigio que permita a los investigadores, dar cuenta, que se ingresó por el frente de la vivienda.

Aristimuño era una mujer carácter y se la había visto en estos días, sana y con gran vitalidad. Realizaba sus actividades como docente en forma normal, participaba de tareas vinculadas con UDOCBA gremio al que estaba adherida y habiendo sido una de las impulsoras en el distrito, como también asistía a una conocida y prestigiosa academia de tangos. Cumplía con sus tareas en la Escuela número 47, a pocas cuadras del domicilio donde fue encontrada. Tenía 54 años.

Militó políticamente, integrando la lista de candidatos a consejera escolar por el Partido Justicialista de Trenque Lauquen, en dos oportunidades.

En las redes sociales se han multiplicado los mensajes de adhesión a la familia y el dolor que experimenta la pérdida física, y las características tortuosas de su muerte.

La cuadra de la calle Carlos Casares donde está la vivienda fue vallada hasta altas horas. Trabajó intensamente la Policía de Trenque Lauquen, Policía Científica y la DDI.

Si bien era imposible recoger datos en el lugar apuntado, una persona que ingresó al lugar al ser consultada por Infoecos, manifestó: «era la imagen que solo suele verse en las series americanas. En una silla, atada y con señales de asfixia. Cuesta creerlo».

Ana Aristimuño fue sepultada, pasadas las 17 horas de hoy, en el cementerio de Trenque Lauquen.