Evolución de la incidencia de la pobreza y la indigencia. Segundo semestre de 2024. ConclusionesLa incidencia de la pobreza alcanzó al 38,1% de las personas y la incidencia de la indigencia al 8,2% de las mismas. Estos datos muestran una disminución de la pobreza en 3,6 pp respecto al segundo semestre de 2023 y de 14,8 pp respecto al primer semestre de 2024. En el caso de la indigencia, el dato muestra una disminución de 3,7 pp respecto al segundo semestre de 2023 y de 9,9 pp respecto al primer semestre de 2024. Vale mencionar que la comparación con el primer semestre de 2024, tanto en indigencia como pobreza, es un modo de referencia dado que metodológicamente no es adecuada la comparación entre semestres no equivalentes.La subestimación de los servicios en la ENGHO y su impacto en la medición de la pobreza: el peso de lo no alimentario, en particular los servicios y el transporte, en la estructura de consumo de los hogares está muy por debajo de su peso real real. En los últimos meses, estos rubros han tenido incrementos muy superiores a los de los alimentos, pero este cambio no se refleja adecuadamente en el coeficiente que determina la Canasta Básica Total (CBT). El efecto concreto es que, al multiplicar la Canasta Básica Alimentaria (CBA) por la inversa del coeficiente de Engel subestimado, el valor de la CBT queda artificialmente bajo porque el coeficiente esta atravesado por la no actualización adecuada del salto de los servicios. Como consecuencia, una mayor cantidad de hogares aparece por encima de la línea de pobreza, incluso cuando sus ingresos no han tenido un crecimiento significativo en términos reales.Apreciación cambiaria y sostenibilidad en la baja de la pobreza: el uso de la apreciación cambiaria como herramienta para contener la inflación permitió una reducción temporal de la pobreza. Sin embargo, su sostenibilidad está condicionada a la estabilidad del tipo de cambio. Si la presión sobre el dólar aumenta y el gobierno se ve forzado a devaluar, los precios—en especial los de los alimentos—podrían dispararse, deteriorando el poder adquisitivo y revirtiendo los avances en la reducción de la pobreza e indigencia.El resultado actual se explica por (la referencia gráfica es sólo a modo ilustrativo en la comparación con el segundo semestre 2023. Las flechas verdes ascendentes indican que la variable colaboró con la reducción de la pobreza):Precio de alimentos y CBA/CBT : el promedio de inflación mensual de alimentos en el segundo semestre (2,2%) se ubicó segundo considerablemente por debajo del semestre de 2023: (14,8%) -12,6 pp Respecto al semestre anterior, se experimentó una disminución: de 9,4% a 2,2%. La CBT disminuyó 2,6 pp (97,4% vs 100,0%) respecto al valor del semestre equivalente anterior en términos reales. En el caso de la CBA, la disminución es mayor: 8,0 pp (109,9% vs 101,9%).Salario de los trabajadores/as no registrados/as y SMVM : el primero se reducción, en términos reales, 16,4 pp respecto del segundo semestre del año anterior y creció 1,2 pp respecto al semestre inmediato anterior, mientras que, si se analiza la evolución del SMVM se percibe un valor 29,0 pp menor que el segundo semestre de 2023 y una retracción de 0,3 pp en relación al semestre inmediato anterior.RIPTE : muestra, en el egundo semestre de 2024, una desmejora en términos reales de 5,1 pp respecto al segundo semestre del año 2023 y una mejora de 9,5 pp respecto al primer semestre de 2024.Indicadores de empleo: durante el segundo semestre de 2024 empeoraron los indicadores de empleo. La desocupación se ubicó en 6,7% (2S2024), superior al segundo semestre de 2023 (5,7%). Paralelamente disminuyó la tasa de empleo que pasó de 45,6% en el segundo semestre de 2023 a 45,4% en el mismo período de 2024.AUH: en el segundo semestre de 2024, el valor real de la AUH aumentó 31,9 pp en términos reales respecto del nivel del segundo semestre de 2023. A su vez, incrementó su valor en 5 pp con respecto al semestre anterior.Tarjeta Alimentar: se percibe una desmejora en el margen la evolución real de los ingresos de la Tarjeta Alimentar: en el segundo semestre de 2024 se reduce 2,1 pp respecto al segundo semestre de 2023. La comparación da cuenta, además, de una disminución de 11,7 pp respecto del semestre inmediato anterior.Planes sociales: el escenario muestra una fenomenal reducción de su poder adquisitivo de 72,3 pp respecto al segundo semestre de 2023 (como resultado del congelamiento del programa en $78.000). Con respecto al semestre anterior, el derrumbe alcanza 14,5 ppJubilación mínima: durante el segundo semestre de 2024, la jubilación mínima con bonos muestra una sensible desmejora de 10,1 pp en relación al primer semestre de 2023. Respecto al semestre inmediato anterior se observa una disminución de 7,3 ppAl comparar la mediana de salarios con la CBT se observa que no logra recuperarse lo perdido durante la gestión de Cambiemos. Los datos muestran que la mediana salarial neta pasó, entre finales de 2017 y finales de 2019, de superar a la CBT en 12 pp a quedar por debajo de la misma en 11,3 pp (una retracción de 23,3 puntos). Durante la gestión actual de Milei la relaciónllegó al mínimo de la serie (74,1%) en diciembre, el mismo nivel que en diciembre de 2022 (93,8%). En relación a noviembre de 2023 se encuentra en un nivel 6,9 pp superior.En el segundo semestre de 2024 es posible observar un nivel de actividad económica igual al del segundo semestre de 2023. Excluyendo el sector agro, que compara contra un 2023 atravesado por la sequía, la retracción interanual del segundo semestre del año es de 1,0%. Más allá de que no se evidencia un nivel de actividad superior al mismo período del año pasado, el guarismo de pobreza se ubicó 3,6 pp por debajo producto de la desaceleración inflacionaria a partir del ancla cambiaria. ¿Qué se puede esperar de la medición en el primer semestre de 2025? En febrero los precios experimentaron una aceleración con respecto a enero y los datos disponibles de consultoras privadas anticipan una nueva aceleración de la inflación mensual para el mes de marzo. El gran interrogante del primer semestre de 2025 es si la apreciación cambiaria se sostiene. Si el gobierno se ve obligado a devaluar por falta de reservas, los precios—especialmente los de los alimentos, altamente sensibles al tipo de cambio—subirían de manera abrupta. En ese escenario, los ingresos quedarían rezagados frente al costo de vida, lo que podría generar un nuevo salto en los niveles de pobreza e indigencia. En relación con los ingresos, el SMVM, en el primer semestre mostrará un sendero de profundización en su pérdida de poder adquisitivo (considerando los datos disponibles hasta marzo de 2024). El RIPTE, que es un indicador que sobreestima tanto las caídas como las recuperaciones salariales, ha mostrado un sendero de recuperación hasta el último dato disponible de diciembre 2024 pero con signos de agotamiento, luego de una profunda caída en los primeros meses del año. Mientras que la AUH tiene una tendencia alcista, la evolución real de la Tarjeta Alimentar presenta una evolución a la baja teniendo en cuenta los datos disponibles hasta febrero 2025. Los planes sociales, de no actualizarse el monto de $78.000, congelado desde enero 2024, seguirán poder adquisitivo durante el 2025. La jubilación mínima con el bono congelado desde marzo en $70.000 seguirá el sendero de pérdida de poder de compra. |