Bolsa de Cereales bahiense: crecimiento del movimiento de granos, oleaginosos, subproductos en junio y julio
Las precipitaciones relevadas hasta el 8 de agosto por la Red de Estaciones Meteorológicas (REM) de la Bolsa de Cereales y Productos de Bahía Blanca, promediaron 23 mm en el sudoeste bonaerense
Fuente: lanueva.com
El movimiento de cereales en el Puerto de Bahía Blanca contabilizó un crecimiento en los meses de junio y julio de este año, según constató la Bolsa de Cereales y Productos de Bahía Blanca.
La descarga de granos, oleaginosos y subproductos en las terminales fue, en junio, de 968.835 toneladas, arribadas en 27.768 vehículos, correspondiendo el 67 % a camiones y el 33 % restante a vagones.
En relación a los embarques, salieron desde el puerto local 779.637 toneladas. El poroto de soja fue el principal producto exportado, con un 43 % de la carga total. China aparece como el principal destino de dicho producto, con un 86 % de participación.
En julio, por su parte, se descargaron 1.372.575 toneladas (+65% i.a) de granos, oleaginosos y subproductos en las terminales portuarias.
El trigo totalizó 144.240 toneladas (84% en camiones y 16% en vagones), el maíz 891 toneladas (65% camiones y 35% vagones), la soja 239.520 toneladas (47% camiones y 53% vagones), la cebada 33.900 toneladas (99% camiones y 1% vagones), el aceite de girasol 6030 toneladas (22% camiones y 78% vagones), girasol 31.290 toneladas (100% camiones), la malta 20.640 toneladas (100% camiones) y los pellets de girasol 5760 toneladas (50% camiones y 50% vagones).
El acumulado en toneladas descargadas fue de 6.824.340 Tn. (+37% i.a).
En cuanto a los embarques, salieron hacia Brasil (92%) y Ecuador (8%) 169.650 toneladas de trigo.
La cebada, en cambio, partió gran parte hacia Colombia, con un total de 11.144 toneladas.
El maíz tuvo como principales destinos Vietnam (32%), Malasia (29%), Arabia Saudita (11%) y Corea del Sur (9%), de un total de 709.457 toneladas.
La soja partió en su totalidad hacia China (228.139 toneladas) y los pellets de girasol se dirigieron a Países Bajos (64.112 ton.).
El aceite de girasol se fue a India (88%) y Perú (12%), siendo el total de 25.187 toneladas.
La malta se trasladó en su totalidad a Brasil (40.423 toneladas).
Cabe destacar que las toneladas anunciadas a embarcar hasta el 17 de este mes son de 300.054, que se traduce en maíz (60%), Cebada (19%) y poroto de soja (21%).
La cosecha de maíz
Según el informe elaborado por la Bolsa de Cereales y Productos de Bahía Blanca, la cosecha de maíz en la zona mostró muy buenos resultados, con un rendimiento promedio estimado en 6.200 kg/ha (+14% i.a.).
En la zona norte se cosechó el 90% del área con rindes variables (de 40 qq/ha hasta 110 qq/ha).
Las labores avanzaron a pesar de la alta humedad en el grano por la flexibilidad en el recibo. En la fase final del cultivo se reportó incidencia de la chicharrita en algunas áreas como el partido de General Villegas.
En la zona centro el 75% de la superficie destinada al cultivo fue cosechada. Los rindes son muy heterogéneos dependiendo del área (entre 50 qq/ha y 95 qq/ha) siendo los más altos los del sudeste bonaerense.
En la zona sur se recolectó el 70% de la superficie. Los rendimiento oscilan en 35 qq/ha (mínimos de 8 qq/ha y máximos de 60 qq/ha).
Los cereales invernales se encuentran en condición buena a regular, los más avanzados transitando el macollaje con una buena sanidad.
Las siembras tempranas fueron las más afectadas por las bajas térmicas y falta de lluvias, mientras que las tardías presentan un retraso en su desarrollo.
En algunas áreas se realizaron tareas de fertilización y otras esperan mejores condiciones hídricas para avanzar con las labores.
Las precipitaciones relevadas hasta el 8 de agosto por la Red de Estaciones Meteorológicas (REM) de la Bolsa de Cereales y Productos de Bahía Blanca, promediaron 23 mm en el sudoeste bonaerense. La lluvias de los últimos días resultan muy necesarias para la correcta implantación y desarrollo de los cultivos invernales, luego de varias semanas sin lluvias recibidas en la región.
Las reservas hídricas continúan disminuyendo, encontrándose entre regulares y escasas en gran parte del área de influencia.