«Este no es un acto político, es un acto humano de reconocimiento», señaló el intendente Miguel Fernández

“No es fácil, claramente Mariel, yo también pensé que ibas a aguantar un poquito más (sin llorar), pero es muy difícil”, comenzó diciendo el Intendente Fernández, en alusión a las palabras pronunciadas por la esposa del homenajeado, la Dra. Mariel Jordán, y agradeció “el acompañamiento de todos, un domingo a la mañana, en este acto sencillo de nominar nuevamente a la Guardia con el nombre de Pablo (Giulianelli)”.

Asimismo recordó que “una amiga, Rosita Ortiz, fue también la que en su momento impulsó la imposición del nombre de Pablo para la Guardia, Rosita tenía un hijo que fue atendido por Pablo, que batalló incansablemente y tenía esa gratitud eterna hacia su médico de cabecera por haberlo cuidado tanto a su hijo y a raíz de eso, éramos concejales con el Flaco (Jorge Jordán), Rosita presentó el proyecto en el Concejo Deliberante, luego se aprobó y después se puso el cartel en la Guardia vieja y parecía oportuno que en la nueva Guardia figurara el nombre de Pablo trasladando la placa original a este lugar”.

“Esta Guardia, es la Guardia de la no inauguración porque en realidad no la inauguramos nunca, se terminó la obra y ahí nomás nos agarró el Covid-19 y empezamos a funcionar sin inauguración, y esto tampoco es una inauguración, ésta va a ser la Guardia no inaugurada, pero no importan las inauguraciones, importa lo que se hace acá adentro, el trabajo de todos los que están acá, médicos, enfermeras y enfermeras, mucamas, auxiliares, administrativos, guardias, que todos los días batallan para atender la primera puerta de ingreso al Hospital que es la Guardia municipal”, subrayó el Intendente.

Sostuvo al respecto que “es un trabajo agotador el que realizan, es muy intenso y justamente por eso lo recordamos a Pablo, porque era un tipo que más allá de que fuera el jefe o no, estaba siempre, era un comodín, estaba siempre dispuesto más allá de su especialidad quirúrgica, a estar a disposición, a subirse a la ambulancia, y por eso se lo recuerda, porque uno puede ser mejor o peor médico, pero lo que a la gente le queda más allá de la calidad profesional es la actitud de servicio, eso es lo que vale en nuestra profesión”.

En este sentido Fernández destacó la importancia de “escuchar, agarrar la mano, contener, sirve para dar casi el 50 por ciento de lo que un paciente necesita cuando requiere atención: esa contención afectiva, bajar el nivel de ansiedad y de miedos que todos tenemos y éste es un trabajo que hacen todos los médicos, enfermeras, diría que quizás las enfermeras tienen un rol preponderante, y Pablo tenía una muy buena relación con todas las enfermas del servicio, que también lo querían mucho”.

Asimismo, el Intendente aprovechó este acto homenaje para reconocer “el esfuerzo de todos los profesionales de la salud en esta época de pandemia, un desafío histórico que lo asumieron con una enorme responsabilidad y una cuota de compromiso que creo que la sociedad merece reconocer y hacerlo público, a mí me gustaría que alguna vez la gente de Trenque Lauquen organice un reconocimiento a todos los profesionales de la salud que han trabajado mucho cuidando a cada uno de los vecinos”.

“Para ellos este reconocimiento también en la memoria de Pablo y también es simbólico que lo hagamos el día que corresponde, aunque sea un domingo, y más allá de las elecciones, porque éste no es un acto político, es un acto humano de reconocimiento y que merece ser hecho el día que corresponde y a la hora que corresponde”, concluyó el Intendente.